En el marco de la Conmemoración del Día Mundial de la Mujer la Dirección de Equidad Social y Género del GPA efectuó el primer encuentro de Artes y Oficios que contó con la presencia de 80 mujeres de las comunidades de Delegsol, Güel, Principal, Morasloma, Bayán y Turi de la provincia del Azuay.
En la parroquia Principal del cantón Chordeleg a mediados del mes de marzo un total de 80 mujeres de distintas edades se graduaron de la Escuela de Artes y Oficios tras haber participado nueve meses en los talleres de capacitación. Equidad Social y Género del GPA cumplió con el objetivo de dar fortalecimiento organizacional a las mujeres rurales de las diferentes escuelas de Artes y Oficios a través del taller teórico- práctico “Bordando tus derechos”, que estuvo a cargo de Teresita Cabrera y Ximena Mogrovejo.
Ximena Bernal, directora de Equidad Social y de Género del GPA, precisó que mediante el proyecto: “Implementación de talleres comunitarios de aprendizaje y formación, II etapa de la Escuela de Formación Popular en Artes y Oficios para Mujeres Rurales en la provincia del Azuay” se fortaleció el conocimiento de derechos, tipos de violencia que aqueja a las mujeres brindando herramientas de autocuidado y fortalecimiento organizacional y comunitario a través de espacios de intercambio de experiencias y aprendizajes en las ramas artesanales como el tejido de la paja toquilla, lana de oveja, telar de pedales y tejido de lana de oveja en palillos y en lana de oveja en telar de cintura.
Las mujeres de la ruralidad de las parroquias Principal, Delegsol, Güel, Turi y de las comunidades de Bayán y Morasloma se han capacitado en talleres de desarrollo organizacional en una primera fase. En la segunda fase se han capacitado en herramientas técnicas de educación financiera e innovación social y actualmente, están incorporando herramientas en marketing y comunicación digital, producción artesanal basada en materia prima local sumando herramientas de control de calidad y creación de productos competitivos basados en prácticas de sostenibilidad.
“Nosotros al ser tejedoras innatas nos beneficiamos del proyecto en temáticas formativas como Marketing Digital, Organización y Asociatividad, Autocuidado, Fortalecimiento Organizacional, Procesos para el valor agregado del sombrero de paja toquilla. Las mujeres que se han quedado y no han sido tentadas por la migración sustentan sus familias con la paja toquilla”, refirió Daniela Castro.
Ximena Mogrovejo Guerrero, coordinadora de la Escuela Rural de formación en Artes y Oficios para mujeres rurales de la provincia del Azuay, puntualizó la importancia de dar continuidad a este proyecto que fomenta el quehacer artesanal y una red de apoyo para mujeres artesanas. “Contamos con seis escuelas, tres en la zona toquillera de Sígsig y Chordeleg y las restantes en la zona alta andina Nabón, Oña y Turi que se dedican a la tejeduría de la lana de oveja. Cristalizar estos procesos en las zonas rurales no ha sido tan fácil porque se debía establecer una relación de confianza para en conjunto armar los proyectos acorde a sus necesidades específicas en el territorio”.
Un reencuentro con los oficios y las narrativas con sus propios oficios es lo que se ha podido lograr mediante este proyecto que fortalece el tejido social de las mujeres del campo azuayo. “Dentro de la administración púbica es difícil encontrar espacios en donde se pueda fortalecer el arte en los pueblos y se dé opciones para crear y vivir de lo que se hace día a día, pero la voluntad política y la herramienta de la mancomunidad lo ha permitido”, informó Sandro Castro, presidente del GAD Principal.
Cecibel Chapa, moradora de Turi y alumna de la Escuela, puntualizó: “Somos capaces de muchas cosas siendo unidas y solidarias, ahora buscamos apoyo para comercializar nuestros productos en una parroquia altamente turística, como lo es Turi”.
Un total de 370 mujeres han sido beneficiarias de este proyecto de Artes y Oficios en el que se ha invertido $109.766,16; Azuay es género y desarrollo productivo.