El parque automotor del Gobierno Provincial del Azuay cuenta con 31 unidades donde existen vehículos que datan de la década de los años 90; en el transcurso de nueve años no se ha renovado e incrementado el parque automotor; dificultando la asignación vehicular a las distintas direcciones departamentales que requieren de movilización. Un parque automotor no renovado obstaculizaba a los técnicos el cumplimiento de las diligencias programadas en el territorio local, provincial y nacional.

La actual administración de la Prefecta Cecilia Méndez Mora a más de incrementar vehículos pesados incorporó 21 livianos que son utilizados para el traslado del personal hacia los diferentes frentes de trabajo. Los señores conductores son clave para llegar a los distintos territorios azuayos a fin de atender necesidades y proyectos viales, de riego, desarrollo económico, gestión ambiental, cultura, equidad y género, comunicación, judicatura, despacho, gestión ambiental; etcétera.
Parte del personal asignado para conducir los nuevos vehículos livianos es César Oswaldo Cordero Cordero. En la administración del Dr. Ítalo Ordóñez Vásquez un 16 de octubre de 1988 ingresó a la Prefectura del Azuay y desde entonces, sirve a la Institución 35 años. Cordero precisó que en la administración de la socióloga Cecilia Méndez:
“En 1 año 10 meses se ha dotado de instrumentos de trabajo nuevos y necesarios para que se cumpla con la labor tesonera y enorme que, enfrenta las dificultades geografías y económicas. Se renovó vehículos que han rebasado su vida útil.
La necesidad enorme de dotar al Azuay de estos vehículos obedece a atender a los sujetos sociales como son los campesinos y campesinas e indígenas de la provincia”.
Por otro lado, Manuel Cuesta, responsable del Parque Automotor del Gobierno Provincial del Azuay manifestó:
“Los vehículos que aún prestan servicio al personal de la Institución han cumplido su vida útil de funcionamiento, presentan daños constantes tanto en su aspecto mecánico como carrocerías. Por su desgaste algunos de ellos se encuentran reparándose constantemente, de allí que era prioritario renovar la flota vehicular”.

En el afán de servir mejor al Azuay se compró 21 camionetas nuevas doble cabina, 4 x 4, turbo diésel, motor 2.0, marca Great Wall mismas que son operadas por hombres y mujeres choferes profesionales del GPA. Estas herramientas de trabajo se suman a las 14 volquetas y 24 máquinas para equipo caminero que fueron entregadas en el año 2021.
“Cesitar” -como le llaman sus compañeros conductores- con lágrimas en los ojos precisó que el mayor logro personal que ha alcanzado en todo el tiempo que ha estado trabajando en la Institución fue educar a sus hijas. Ellas con su esfuerzo lograron cursar las aulas universitarias consiguiendo profesionalizarse en las ciencias de Arqueología y Economía.
Cordero durante su experiencia y paso por el Gobierno Provincial del Azuay reconoce el cambio que esta administración ha impulsado en la provincia.
“Estoy agradecido por la bendición de tener un trabajo. Con la actual administración se observan cambios, cuando íbamos a la zona costanera de la provincia del Azuay nos quedábamos esperando que baje la crecida de los ríos para poder cruzar y avanzar a nuestro destino, ahora con buenas vías y vehículos nuevos cumplimos mejor nuestro trabajo”, refirió Cordero.
Los amigos y compañeros de César lo consideran como un hombre de valores, cuya característica le ha permitido permanecer, mantenerse y aportar en el transcurso de 7 administraciones, que estuvieron al frente del Gobierno Provincial del Azuay. Cesitar se vinculó al Gobierno Provincial del Azuay en calidad de conserje y luego aportó en la estación de servicio de combustible. Posteriormente, como guardián de la Bodega hasta ascender a conductor de un vehículo liviano. Entre sus aspiraciones personales consta jubilarse, disfrutar y dedicar más tiempo a sus nietos y familia.
Nuestro entrevistado nos compartió una de sus experiencias en la zona costanera de la parroquia Molleturo:
“Para llegar a Estero Piedras era un infierno y un riesgo total. Se ingresaba por la costa-Rancho Negro, en este lugar nos encontraba gente que robaba y asaltaba, este era el único acceso; ahora se puede ingresar y salir por Tamarindo sin ningún problema, es un gran logro que se ha hecho”.

Con la adquisición de los vehículos nuevos se está trabajando mancomunadamente en el territorio a través de una planificación que atiende a las necesidades de los 15 cantones y 61 parroquias. Con una inversión de $284. 723, 23 dólares se renovó el parque automotor del GPA, gracias a la voluntad política de esta administración. Cesar argumentó:
“La administración de la Soc. Cecilia Méndez Mora ha sido la mejor, como conductor he tenido muchas oportunidades de ayudar, trabajar y servir al Azuay, en madrugadas y noches. Esta administración vino a cambiar mucho con relación a la anterior; por ejemplo: el trato a la gente, a nosotros los trabajadores. Antes no éramos tratados cordialmente, incluso nos tenían en mal concepto. Ahora es todo lo contrario”.
César Codero explicó que con la renovación de este parque automotor se beneficia la provincia y de manera especial, la ruralidad. En este sentido, un total de 38 vehículos entre livianos, caminero y pesado forman parte del parque automotor del Gobierno Provincial del Azuay.
Esta adquisición emblemática de la administración de la Prefecta del Azuay, Cecilia Méndez Mora, mejora la atención vial a la población rural, ofrece oportunidades laborales a los conductores y permite mejorar las condiciones de traslado de los funcionarios públicos en sus distintos campos de acción.