La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, personificada por Agustín Zimmermann, representante residente de la FAO en Ecuador, acompañado de su equipo técnico, visitó la Casa de la Provincia el jueves 21 de julio. Se aprovechó esta visita protocolaria para estrechar lazos de cooperación internacional y abordar temáticas de interés para las dos entidades.
Cecilia Méndez Mora, prefecta del Azuay acompañada por María Augusta Orellana, Coordinadora de Cooperación Internacional; Norma Aguirre, directora de Desarrollo Productivo y Comunitario, más los gerentes Valeria Gavilánez de LACAzuay y Eduardo Vintimilla de AgroAzuay de manera muy oportuna y breve explicaron los proyectos ejecutados en la provincia en torno al gran paraguas de la ruralidad: encausar los temas lecheros, la transición de la ganadería hacia la agricultura; impulsar las economías campesinas fortaleciendo la producción y comercialización de sus productos agroecológicos.
Acuerdos de conservación de fuentes hídricas
Eduardo Vintimilla, gerente de AgroAzuay, puntualizó la necesidad de apalancar recursos para un proyecto valorado en 130 mil dólares a fin de cuidar las fuentes hídricas, impulsar la actividad agrícola y, sobre todo, atender a las familias que viven cerca de las dos cuencas del río Cumbe y de la Junta de Agua de Nero-Baños.
Desde AgroAzuay se ha priorizado la atención de 25 familias ubicadas en los alrededores del río Yutujapina. Por años, estas familias han sido olvidadas y su única actividad económica gira en torno a la ganadería, convirtiéndose en una amenaza para los bosques nativos. “Son los campesinos de esta cuenca del río Yutujapina los que, por convicción y cercanía a la tierra, los que más cuidan la naturaleza, sin embargo, podrían inmiscuirse en los bosques por esa necesidad económica. Bajo este contexto, es necesario que el proyecto pueda impulsar la siembra y producción agrícola dando vida a las huertas y potencializando la siembra de las plantas ancestrales” expresó el gerente de AgroAzuay.
Finalmente, reiteró que es fundamental recurrir a la cooperación internacional para obtener recursos económicos que permitan extender el proyecto y ampliar el número de beneficiarios, es así que se podrán generar acciones que no atenten contra los bosques nativos e impulsen la economía a través de la producción de la actividad agrícola.
Hay que regresar del cerro a la chacra
Cecilia Méndez Mora, Prefecta del Azuay, puntualizó que es indispensable regresar del cerro a la chacra por la necesidad de atender la desnutrición crónica de los niños, niñas y personas de la tercera edad, de nuestros territorios rurales. La soberanía alimentaria y el rescate de las semillas es fundamental para garantizar la alimentación de los campos y las grandes ciudades, para ello, hay que mejorar los pastos en espacios reducidos dando mayor impulso a la actividad agrícola. “Son necesarias las políticas de incentivo y acompañamiento a la ruralidad atendiendo la salud -desde 1940 hay índices de desnutrición crónica infantil-; educación de tercer y cuarto nivel para educación rural. Debemos mancomunar capacidades autónomas de las regiones como una herramienta de trabajo, que no es igual a una minga. La mancomunidad nos obliga a garantizar recursos económicos, talentos técnicos, tecnológicos, planificación, voluntad política y corresponsabilidad ciudadana” señaló la Prefecta del Azuay.
Posicionar una marca con identidad
Valeria Gavilánez, gerente de LAC Azuay, informó que en 1 año y 10 meses esta empresa que estuvo a punto de desaparecer ha logrado reactivarse con apenas siete personas: tres administrativos y cuatro de planta. Con trabajo perseverante y compromiso con la ruralidad esta empresa ha logrado trabajar directamente con 125 productores y con mayor oferta de productos acorde a las exigencias de la población cuencana y de la región costanera. Entre sus productos estrella están: leche, yogurt, manjares de leche, quesos en sus distintas variedades, presentaciones y sabores. “No solo queremos posesionar una marca, un producto; sino la identidad, la pertenencia, el origen y el apego a consumir lo nuestro. Trabajamos para dinamizar la economía más afectada dentro del circuito productivo” indicó la Gerente de LACAzuay.
Firma de convenio con la Universidad de Cuenca
Norma Aguirre, directora de Desarrollo Productivo Comunitario del GPA, explicó que a través de su acompañamiento en el territorio varias comunidades han podido impulsar sus economías en torno a la producción: artesanal, agrícola, lácteos y derivados. Citó como ejemplos a la comunidad de Zhidmad-Jima, Pahuancay-Sevilla de Oro y Chaucha con proyectos que han generado mayor actividad productiva y mejoras de las economías campesinas. En Chaucha ya se trabaja en la recuperación de las semillas y de la soberanía alimentaria.
Así también refirió que en los próximos días se firmará un convenio con la Universidad de Cuenca a fin de que los estudiantes de Ciencias Químicas puedan realizar sus prácticas en los territorios azuayos acompañando a los campesinos ganaderos en la visión tecnológica para el mejoramiento de la calidad de leche.
Nuestra mirada en la ruralidad
“Tenemos que volcar nuestra mirada a la ruralidad atendiendo la salud de los niños y personas adultas mayores. No a la desnutrición infantil y sí al derecho de la educación rural de tercer y cuarto nivel para ello, hay que fortalecer la institucionalidad pública dirigida a las necesidades de los campesinos”, acotó la prefecta del Azuay.
En las próximas semanas la Prefectura del Azuay enviará un proyecto que a más de apuntalar la implementación de sistemas integrales sostenibles agropecuarios incorporará elementos para la conservación de las fuentes hídricas.
Desde su primera visita a la provincia del Azuay en el mes de marzo del 2021, la FAO pudo apreciar el compromiso de trabajo, avances y ejecución de proyectos que la Prefectura ha venido realizando a favor de un Azuay Estratégico.